El problema es que no confiamos en nadie... ni en nosotros mismos
¿Por qué no confiamos en quienes tenemos cerca, en las instituciones, en quienes nos gobiernan, en quienes se supone nos deberían cuidar? ¿por qué no confiamos en nadie, ni en nosotros mismos? Cuando éramos pequeños confiar en quien estaba al lado era la base de la vida. Confiábamos en que alguien nos cuidaba, nos alimentaba y nos hacía compañía. No cabía la posibilidad de dudar en que el otro no estaría ahí. Sin embargo, cuando esa confianza comienza a ponerse en duda comienzan los problemas. Según la Real Academia de la Lengua Confiar es la " Esperanza firme que se tiene de alguien o algo ". Si confiar es la esperanza firme sobre alguien, va de la mano con ser empático y ponerse en los zapatos de quienes tenemos cerca. Al entender un poco más cómo se siente la persona que está a mi lado, si soy capaz de preguntarle cómo está seguro podré confiar en lo que hará. Sin embargo, hoy nos relacionamos con desconfianza. Por lo general se celebra la "astucia...